Mariella Barbato Le Patate al Forno, es un plato que en Nápoles no necesita presentación. No son protagonistas, pero sin ellos, la mesa perdería su alma. Las patate al forno —papas al horno con romero, cebolla, ajo y vino blanco— pertenecen a esa categoría de recetas sencillas y eternas, capaces de llenar la casa con un aroma que anuncia domingo, familia y calidez.
Doradas, fragantes y tiernas por dentro, las patate al forno son el acompañamiento clásico de las butifarras caseras (salsicce al forno) o del pollo asado, dos platos muy presentes en los hogares napolitanos durante los almuerzos familiares. Sin embargo, su sabor es tan completo que pueden disfrutarse solas, con un poco de pan para recoger el jugo del asado.
El alma humilde de un plato eterno
Como muchas recetas napolitanas, las patate al forno nacen de la cocina del aprovechamiento, de la necesidad de hacer mucho con poco. Las papas —introducidas en el sur de Italia en el siglo XVII— se convirtieron en un ingrediente básico y versátil en la Campania, donde el clima y la tierra volcánica del Vesubio les dan un sabor único, ligeramente dulce y muy sabroso.
Este plato, que parece simple, es en realidad un ejemplo perfecto del equilibrio entre tiempo, aroma y textura. En los hogares napolitanos, cada familia tiene su versión: algunas añaden tomates cherry, otras utilizan vino tinto en lugar de blanco, pero todas comparten la misma filosofía: dejar que el horno haga su magia.
Ingredientes para 4 personas
- 1 kg de papas (preferiblemente amarillas, firmes)
- 1 cebolla grande
- 2-3 dientes de ajo
- 1 ramita de romero fresco
- 100 ml de vino blanco seco
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Opcional: un poco de orégano o perejil fresco al final, para perfumar.
Preparación paso a paso
- Preparar las papas
Pela las papas y córtalas en trozos medianos, procurando que tengan un tamaño uniforme para que se cocinen de manera pareja. Enjuágalas bajo agua fría para quitar el exceso de almidón y sécalas bien con un paño o papel de cocina. - Preparar la base aromática
En una fuente de horno amplia, añade un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Incorpora las papas, la cebolla cortada en gajos, los dientes de ajo enteros (con piel si prefieres un sabor más suave), y el romero. Mezcla bien con las manos para que todo se impregne del aceite y las hierbas. - Añadir el vino blanco
Vierte el vino blanco sobre las papas. Este paso es fundamental: el vino aporta aroma y ayuda a que las papas queden tiernas por dentro y doradas por fuera. Salpimienta generosamente. - Cocción
Hornea a 200 °C durante unos 50-60 minutos, removiendo las papas cada 20 minutos para que se doren por igual. Estarán listas cuando la superficie esté crujiente y el interior, tierno. - Servir
Sirve las patate al forno bien calientes, directamente de la fuente, acompañando butifarras, pollo al horno o cualquier carne asada. Y si te sobra un poco… al día siguiente, estarán aún más sabrosas.
El toque napolitano: vino y sencillez
El secreto de las patate al forno napolitanas está en la combinación del vino blanco y el romero, que crean un aroma irresistible. En algunos barrios, se acostumbra añadir un poco del jugo del asado (pollo o cerdo) al final de la cocción, para que las papas absorban todo el sabor.
Es un plato que une lo cotidiano con lo festivo, lo humilde con lo exquisito.
Y lo mejor: su olor. Ese perfume que se escapa del horno y llena la casa de promesas. Es el aroma de las comidas familiares, de los domingos lentos, de las charlas entre risas y copas de vino.
Más que una guarnición
Las patate al forno son mucho más que una guarnición. Son un símbolo del espíritu napolitano: sencillo, generoso, apasionado.
No hay mesa sin pan, sin vino y sin un plato que caliente el alma.
Y este, con su sabor rústico y su textura dorada, lo logra cada vez.
Con mucho cariño,
Vuestra chica napolitana!
